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Opina Rector del CUC de la UDG sobre Consulta Estero El Salado

Por Daniel Mora Valencia

Distintas opiniones que surgirán en torno a la consulta sobre el estero El Salado, pudieran no ajustarse a las condiciones de protección o de necesidades de esta Área Natural Protegida, señaló Jorge Téllez López, rector del Centro Universitario de la Costa, quien también reconoció que pudiera ser al contrario y darse propuestas que bien pudieran ser utilizadas.

A este respecto, precisó que podría tratarse de parques de utilidad pública y no con infraestructura que no sea ad hoc a la conservación, ello hablando de espacios culturales, recreativos, de convivencia familiar, espacios para ciclo vías o para caminatas.

“Yo siempre he pensado que las actividades deportivas que hacemos sobre la Avenida Francisco Medina Ascencio, que la perdemos cada vez que hay una actividad deportiva, nosotros también somos culpables porque ahí hacemos la carrera de los leones negros, y eso es porque no tenemos los espacios en la ciudad de intervención deportiva o recreativa para no generar afectaciones”.

En este sentido, reiteró que considera que un circuito alrededor del ANP y sobre los sitios que no afecten la conservación, como por ejemplo un gran malecón alrededor, sí podría ser viable bajo los estudios que sean necesarios y así los jóvenes pudieran andar en ese lugar en bicicleta, patines o corriendo, es decir fomentar una serie de hábitos saludables de los que tanta necesidad tiene la población.

De tal manera apuntó, sí cree que pudieran compaginarse muchos proyectos, pero puntualizó, lo primero es escuchar a la ciudadanía, ver la viabilidad de lo que se propone y de lo que otros proponen, aunque este acotó, ya será un proceso técnico de evaluación en materia de impacto ambiental y de capacidad de carga.

Téllez López destacó que lo que ya ofrece el estero en materia de biodiversidad y servicios ecosistémicos, está probado, “gracias al estero del Salado como biodigestor que es, es que esa contingencia de derrame de aguas negras que sucedió en Puerto Vallarta, que pudo haber sido gravísimo en la economía del destino, no sucedió gracias a la capacidad biodigestora que tuvo el estero, y aunque afectó al Salado, no afectó a nuestro destino”.

En este contexto, señaló que eso quiere decir que la capacidad de purificación y de remediación es superior a los costos económicos que pueden tener diez plantas de tratamiento de aguas negras.

De ahí que reiterara que lo primero es seguirlo conservando aunque manifestó que cree que las ANP, no sólo en México, sí deben tener alguna utilidad pública, porque si se mantienen aisladas de la sociedad, terminan siendo espacios abandonados y nadie asegura que la autoridad o a quien corresponda, está haciendo lo correcto para su conservación.

“Un sitio no vigilado, no manejado, sufre invasiones, sufre contaminación, seguramente se va a meter la gente a talar el mangle o a depredar su fauna, entonces sí necesitamos un plan de manejo, necesitamos que la gente se apropie del área natural, que la disfrute con la prudencia que dicte las condiciones bióticas y de servicios del estero”, concluyó.

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